Una de las preocupaciones💭de los propietarios, cuando afrontan la venta de su empresa, se concentra en la situación de sus empleados. Esas personas que le han ayudado a construir el modelo de negocio que, finalmente, ha propiciado el interés de los inversores🧐💰
Es muy usual en estos casos que sean los mismos propietarios quienes propongan al comprador su permanencia en la compañía🤝, una vez se ha materializado la venta, para que la transición en los órganos de gobierno sea lo más fluida y suave posible.
Lo contrario suele derivar en ineficiencias en la gestión👎, que surgen de un ambiente enrarecido que a su vez viene provocado por la rapidez💨 con la que el propietario/vendedor desparece y el nuevo propietario/comprador aparece.